Día 13.02.2020  video de fotos          12videos día
  Día importante en nuestro viaje, por los lugares que íbamos a visitar y por lo entrañable, sobre todo, en lo que respecta a la casa de Amadou Fofana, amigo desde hace unos 12 años que lo conocimos cuando recaló en Boltaña y se incorporó como jugador de fútbol al equipo del pueblo, entonces empezó nuestra relación con el, pero como podíamos, aquel entonces, imaginar que un día visitaríamos su casa en Gambia; de ahí el valor de esta visita y tiempo compartido con su familia.
  Pero vayamos por orden, la primera visita del día fue al Palmary School en Bundung (1) y la gran espectativa levantada por otros viajeros anteriores puedo asegurar que se quedó corta, ya en la entrada del colegio estuvimos con un grupo de niños cuya sonrisa es tan limpia que te cautiva a simple vista y con unos simples caramelos muestran una felicidad envidiable que hace que te rindas ante tanta naturalidad.
 

 

 
  Harían falta muchas fotos para mostrar esto que escribo, por eso recomiendo ver el video indicado arriba con el (1). En las fotos de abajo puede verse un momento del gran revuelo que organizamos con el reparto de chucherías, tal vez fuera algo no muy del todo oportuno, pero puedo asegurar que fue un rato de agradable convivencia y quiero dar las gracias a las maestras por su inestimable ayuda para organizar el reparto.
 

 
  Una vez acabada la visita al colegio donde ya nos había acompañado Abdulai, hermano de Amadou, nos dirijimos a su casa, allí además de un caluroso recibimiento lleno de muestras de simpatía y cariño, tuvimos la maravillosa gran experiencia de compartir espacio con los pequeños de la casa, tal vez mejor debería decir casas, numerosos y simpáticos niños nos rodearon y abrazaron con enorme alborozo en el tiempo que pasamos con ellos antes de la comida típicamente gambiana con la que nos obsequiaron y la que degustamos comiéndola con la mano, derecha, como es precepto musulmán, ver el (2). Después tomamos attaya* bebida/tentempie típica en Gambia, *es un tipo de té verde, pero implica más que la bebida en si, Attaya es un ritual, el pasatiempo favorito de los gambianos, especialmente de los hombres jóvenes.
 

 

 

 

  Y si la estancia y comida fueron altamente gratificantes, qué decir de la despedida, ésta fue de un calor y cariño insuperables, abrazos y saludos efusivos llenaron nuestra marcha.